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Una sociedad es como un cuerpo. Si una parte está lesionada, también tiene un impacto en otras partes del cuerpo.
Es deber de todo ser humano proporcionar a los demás una recompensa fructífera en el más allá. Por el bien de la humanidad, nuestro compromiso es comprometernos a ayudar a otros y regalar su parte como donación. Una sociedad justa se construye cuando nadie se queda atrás. Es por eso que Dar-Al Hikmah trabaja incansablemente con sus hermanos y hermanas para apoyar a cada individuo y su familia para una sociedad mejor y el mañana.
¿Cómo hacer una gran diferencia?
Dar Al-Hikmah no es una organización que solo proporciona a los necesitados. Se esfuerza por alentar a las personas a defenderse por sí mismas. Nuestro deber como humanos es empoderar a las personas para que puedan esforzarse y ayudarse a sí mismas.
Alentar el alivio inmediato no es una solución viable. A pesar de la ayuda urgente, que no se beneficia a largo plazo, consultar a cada individuo sobre sus crisis, ya sea financiera o social, es más creíble.
En otras palabras, Dar Al-Hikmah se acerca a cada individuo y estudia su situación según el caso para ver si hay una solución adecuada y sostenible para el problema.
Pero ninguna organización se construye sin la ayuda de los donantes. Con la ayuda colectiva de los donantes, las organizaciones pueden romper los grilletes de la pobreza. Son como la base de una buena causa para la humanidad.